Descargar PDF
 
 
Editorial

01. Factores psicosociales relacionados con el consumo de alcohol de estudiantes universitarios en espacios públicos

02. Presencia de síndrome de estrés laboral como predictor de síntomas de depresión en el personal que labora en un centro de protección
03. Acciones de inclusión social con menores de edad en condición vulnerable
04. Los límites de la violencia en los escenarios de crueldad. Una aproximación crítica al “sinsentido” y el “hedonismo” atribuidos a la acción cruel
05. La participación juvenil en la resolución de conflictos y toma de decisiones
PRESENTACIÓN DE LA REVISTA
Tipo de artículos que se publican Instrucción para los autores
 

Factores psicosociales relacionados con el consumo de alcohol de estudiantes universitarios en espacios públicos

Roa C. **
Correa, J.; Díaz, J. y Gamba, L.***

*Proyecto de investigación formativa llevado a cabo en el Programa de Psicología de la Universidad Piloto de Colombia. Grupo de Investigación en desarrollo humano PENTALFA.
** Asesora del proyecto de investigación: Claudia Patricia Roa.
Correo electrónico: claudia-roa@unipiloto.edu.co
***Participan como investigadores principales los estudiantes de Psicología de la Universidad Piloto de Colombia: Jessica Correa, Juliana Díaz y Lizeth Gamba.

Recibido: 30/11/2011
Aprobado: 24 Y 25 /01/2012

Introducción

A través de la historia el consumo de alcohol ha sido socialmente aceptado (Cicua, Méndez & Muñoz, 2008). El inicio de la adolescencia comienza de  los 10 años hasta los 25 años, etapa en la cual empieza el consumo de alcohol. Este es  un periodo de transición de la niñez a la vida adulta donde se generan cambios en el desarrollo psicológico, biológico, sexual y social; tiene características como la búsqueda de identidad, rebeldía ante las normas que se le imponen y búsqueda de un grupo social (Calafat, Moyá, & Jerez, 2011).
Durante la vida del adolescente, el modelo familiar, la interacción con un grupo y su contexto social, va aprendiendo cómo comportarse, cómo interactuar y que hay ciertas normas dentro el contexto en el que se desenvuelve. Sin embargo,  cabe resaltar que la adolescencia, como ya se ha mencionado, es un acontecimiento del ciclo vital donde se generan diversos cambios, búsqueda de identidad y necesidad de experimentación. Debido a esto, señala  Rice (1997) que el adolescente aprende las reglas mas no las aplica en su vida durante esta época (Rice, 1997).
En el campo universitario, los jóvenes tienden a consumir alcohol en la vía pública, la mayoría de ellos salen en masa durante las noches de los viernes y sábados, en esas horas cada individuo experimenta un proceso vital de socialización, relacionándose con su grupo habitual de amigos y, posiblemente con un nuevo grupo social. El problema empieza a surgir cuando se reduce el mantenimiento de esas interacciones sociales al ámbito privado, delegando la tutela de su desarrollo a los empresarios que lo gestionan e imponen su único criterio, acaparando el control del espacio donde se debe permitir el consumo para así poder producir sus beneficios. Una de las consecuencias de este monopolio es el aumento poco moderado del precio del producto consumido, en este caso el alcohol; que en la mayoría de los casos es mucho más elevado al que puede acceder esta juventud (Delgado, 2006).
Debido a  esto, los diferentes factores que inciden para consumir alcohol en espacio público recaen en la posibilidad de conocer más amigos, el producto tiende a ser más económico, las promociones son más asequibles, y en algunos casos por tradición sociocultural. Pero no son sólo estos factores externos los que mantienen esta conducta, están los factores individuales expuestos en el Inventario Situacional de Consumo de Alcohol (ISCA) donde se evalúan las diferentes dimensiones. El autocontrol, emociones agradables y desagradables, etc. (Cicua, 2008).
Para identificar las situaciones de riesgo Marlatt y Gordon clasificaron trescientos once episodios de recaída. Esta muestra fue tomada en pacientes alcohólicos, heroinómanos, ludópatas y mujeres obesas. La clasificación se denominó en dos categorías, que se agrupan en situaciones intrapersonales y situaciones interpersonales. En estas situaciones intrapersonales son aquellos estímulos internos, es decir, fisiológicos, emocionales o cognitivos como impulsos que incitan al consumo, como los estados fisiológicos desagradables, estados emocionales negativos, estados emocionales positivos. En las situaciones interpersonales son ambientes externos los que disparan los deseos de consumir: ya sea por conflictos familiares, sociales o laborales, presión social y los estados de ánimo positivos en compañía de otros (Becoña Iglesias, Rodríguez López & Salazar Bernard, 1999).
Para Marlatt (1985) la situación de alto riesgo como cualquier situación, incluyendo las reacciones emocionales a la situación, representa una amenaza para la sensación de control del individuo y aumenta el riesgo de recaída. Desde el presupuesto de que la conducta pasada es el mejor predictor de la conducta futura, se puede esperar que las situaciones externas o internas que han precipitado una recaída en el pasado, provoquen tentaciones de consumo en el futuro. Algunos de los factores que se van a tener en cuenta en esta investigación son algunos propuestos por Marlatt utilizados en el Inventario Situacional de Consumo de Alcohol, el cual se divide en dos  categorías generales: determinantes intrapersonales e interpersonales (Villa, 1997). Divididas en dos categorías, la primera de éstas son situaciones personales, las cuales el beber involucra una respuesta a un evento de naturaleza psicológica o física, ésta se subdivide en cinco categorías: emociones desagradables, malestar físico, emociones agradables probando auto-control y necesidad o urgencia por consumir. Y la segunda de éstas son las situaciones que involucran a terceras personas, conflicto con otros, presión social y momentos agradables (Annis, 1982).
 Cada uno de estos factores mencionados anteriormente tiene una razón de ser con respecto a la recaída y al consumo de alcohol, visto desde situaciones frecuentes en la vida de los seres humanos. Para Marlatt la recaída y el proceso de asimilación del consumo se deben como una serie de circunstancias en donde un adicto o una persona que consume alcohol, se ve asediada por factores interpersonales e intrapersonales provocando un consumo excesivo, a causa de esto los adictos lo ven como un rescate o una salida para aliviar asperezas. Por ello, se plantearon una serie de categorías, en donde Marlatt las describe de la siguiente forma: Emociones negativas. Este factor se refiere a las recaídas que suceden cuando el individuo tiene trastornos emocionales como sentimientos de ira, tristeza, ansiedad, aburrimiento, depresión, culpa y temor por algún evento próximo. En algunos casos estos sentimientos son provocados por una sucesión  de eventos, por ejemplo: un alcohólico empieza a consumir por algún suceso o motivo externo o interno, el cual le provoca un malestar emocional, tomando esto como excusa para ingerir alcohol (Gordon & Gordon, 1985)

 

(Continua)

Descargar PDF
RESUMEN

El consumo de alcohol se ha convertido en una problemática, debido al riesgo que le genera a la población juvenil, y al incremento que se ha evidenciado en la comunidad universitaria. El objetivo principal de esta investigación es describir los factores psicosociales relacionados con el consumo de alcohol de estudiantes universitarios en el espacio público de la zona de Chapinero. Para ello, se utilizó una versión modificada del instrumento diseñado por Annis, G. & Davis (1998), Inventario Situacional de Consumo de Alcohol (ISCA), el cual mide ocho factores vinculados con el consumo de alcohol. Se pudo concluir que los jóvenes universitarios ven dicha ingesta en espacios públicos como una situacion agradable en donde pueden relacionarse de una mejor forma.

Palabras claves

Consumo, alcohol, factores psicosociales, espacio público.

Imagen:
www.photoxpress.com Stepanov

 

Universidad Piloto de Colombia / Bogotá D.C. - Carrera 9 No. 45A - 44 primer piso.
Para Información comuniquese al Conmutador.: (1) 332 29 00 -
Tel.: (1) 245 32 40 - 245 51 84 Fax: (1) 3201706