Introducción
Este estudio tiene como objetivo describir y comprender la integración y resignificación de las experiencias vividas por cuatro inmigrantes hispanos en el condado de Los Ángeles, California, con respecto a la manera en que construyen y modifican sus expectativas de vida durante su proceso de aculturación a los Estados Unidos de América, y toma, como punto de partida, la asunción de que la construcción de expectativas de vida y visión de futuro de un inmigrante en proceso de aculturación se inicia desde antes del momento específico de migrar y se integra con diferentes aspectos de la vida del sujeto. Estos aspectos se definen en este proyecto como experiencias vividas las cuales incluyen todos los eventos significativos para el inmigrante durante el curso de su historia; también incluyen sus percepciones, significados y creencias con respecto a dichos eventos.
Estados Unidos de América es uno de los países con más variedad cultural y racial debido a la inmigración de gentes provenientes de todo el mundo. Aunque es por tradición un país de inmigrantes, en los últimos decenios la inmigración ilegal de latinoamericanos, que en buena medida buscan escapar de la situación económica, política y de inseguridad social de sus países de origen, se ha convertido en un tema de debate. Un gran número de inmigrantes de habla hispana ingresa cada año al país de diferentes maneras y por diferentes motivos; de este número, una cantidad significativa migra en busca de mejores oportunidades.
Para describir de manera general la condición legal del inmigrante, se puede decir que los hay de dos tipos: legal e ilegal o no autorizado. California es el estado con mayor número de inmigrantes no autorizados en el 2011 (Hoefer, Rytina y Baker, 2011) y solamente en el condado de Los Ángeles el 48.1% de la población es de raza hispana (U.S Census Bureau, 2011).
El interés en realizar esta investigación se centra en la vida del inmigrante hispano propiamente, ya que los estudios más populares son cuantitativos y mixtos, los cuales abordan aspectos sociopolíticos de la migración, especialmente de tipo ilegal (Ejemplo: Capps, Fortuny y Passel, 2007; Hoefer, Rytina y Baker, 2011). Otros estudios se enfocan un poco más en los aspectos psicológicos de la migración directamente, observando, midiendo y correlacionando el nivel de aculturación y la identidad, con variables como ansiedad (Sánchez y López, 2008), edad de migración (Beck, Corak, y Tienda, 2012), consumo de alcohol (Kail, Zayas, y Magaldy, 2000) rasgos suicidas, conducta sexual y consumo de sustancias (Fraser et, al. 1998). Estos estudios tienen la tendencia a defender, proponer o debatir diferentes modelos de identidad, en especial el de Berry (1980), y Berry (1990).
En su modelo bidimensional, Berry sugiere dos dimensiones en la aculturación. La primera es la identidad étnica, la cual es el conjunto de valores, conocimiento, tradiciones y actitudes del país de origen; la segunda es la identidad del país anfitrión, la cual se relaciona con el conocimiento, interiorización y práctica de los diferentes aspectos culturales del país al que se migra. La interacción de las dos dimensiones puede generar 4 orientaciones de aculturación: si la identidad étnica es afirmativa (más predominio), y la del país anfitrión es negativa (menor o ningún predominio), entonces el sujeto tendrá una identidad separada; si la identidad étnica y la del país anfitrión tienen el mismo predominio, entonces el sujeto posee una identidad integrada o bicultural; si la identidad étnica no es predominante y en cambio la del país anfitrión es afirmativa, el inmigrante tendrá una identidad asimilada; y por último, si el inmigrante no posee predominio en ninguna de estas dimensiones, entonces tendrá una identidad marginada (Berry, 1980). En el año 1990, Berry elimina la identidad marginada e incluye la anomia y el individualismo (Castellá, 2003).
Por último se encuentran investigaciones que estudian poblaciones hispanas de características culturales, geográficas y grupales homogéneas que habitan en una misma área y tienen formas particulares de interacción que afectan el desarrollo económico y cultural propio, así como el de la cultura receptora; las más comunes pertenecen al tema de enclave étnico (Ejemplo: Beckhusen, Florax, de Graff, Pool y Waldorf, 2012; Puig, Furnam, Negi, y Jones, 2009). Finalmente los estudios como el de Gallimore, Reese y Garnier (2011), y Hao y Banstead-Bruns (1998), se refieren más específicamente a las expectativas de los inmigrantes hispanos con respecto a sus hijos y el rendimiento académico de los mismos.
Las limitaciones relacionadas con el presente proyecto tienen que ver con los alcances de la investigación cualitativa en general, con el tipo de análisis fenomenológico, los instrumentos usados y finalmente, con el número de sujetos que participaron en el estudio. En primer lugar, un estudio cualitativo y especialmente de tipo fenomenológico únicamente pretende entender, interpretar y explorar realidades locales, así que la posibilidad de generalizar este estudio con la población hispana total de los Estados Unidos no fue una de las metas propuestas. También se reconoce que Los Ángeles, CA, es una de las áreas metropolitanas de los Estados Unidos con más alta concentración e influencia de la cultura hispana; esto tiene efectos relevantes en la vida de los sujetos que los diferencia de inmigrantes hispanos que residen en otras áreas del país. Por estos motivos el estudio se enfoca en casos específicos de sujetos seleccionados intencionalmente, con diferentes historias de vida, para así poder observar sus procesos de construcción de expectativas y esquemas en torno a la migración. |